Bolivia
Solo un 18% de las exportaciones mineras del país en 2013 fueron de metales. Las empresas estatales aportaron a ese valor con el 45%, los privados un 37% y las Cooperativas con el 17%.
Martes 30 de Septiembre de 2014.- Corocoro, Karachipampa, Vinto y dos nuevas refinerías de Zinc serían la apuesta de Bolivia para aumentar la producción de minerales metálicos; señala una nota del diario La Razón. Según los datos que entrega el Ministerio de Minería de ese país, las exportaciones de este tipo de minerales representaron apenas un 18% del total de los envíos del sector. Y dado que un 45% de ellos corresponden al sector estatal, el Gobierno estaría realizando varias inversiones a través de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) para aumentar la producción de metálicos, con los que “se gana casi el doble”, como dice el Viceministro de Desarrollo Productivo Minero Metalúrgico, Víctor Hugo Llanos, citado por la publicación.
“Vender como materia prima ya no está como nuestra política, ahora es la industrialización.?Entonces, vamos avanzar en ese tema”, aseguró la autoridad. Con esa perspectiva es que se construyó la planta hidrometalúrgica de Corocoro, se reactivó Karachipampa y se ampliará la capacidad de procesamiento de Vinto. Las últimas dos son fundidoras en las que es posible obtener metales y aleaciones de mayor valor, y en ellas se recupera también minerales como Oro, Iridio y Platino, entre otros. Además se prepara la construcción de dos refinerías en las que se podrá procesar Cobre, Estaño, Plomo, Plata y Zinc; señala el reportaje de La Razón.
Corocoro puede producir anualmente 3.500 toneladas de Cobre electrolítico; Karachipampa procesará 20.000 toneladas de lingotes de Plomo y 3,8 millones de Onzas troy de Plata; Vinto absorberá casi el total de la producción nacional de Estaño (18.000 toneladas), y las refinerías de Zinc procesarán 2.000 toneladas, un poco menos de la mitad de lo que produce el país; señalan desde el Gobierno, que prevé iniciar a mediados de 2015 la construcción de las dos refinerías de Zinc, en Potosí y Oruro.
“Los recursos serán de la Comibol, que ya los tiene programados en su plan operativo anual", dijo el Viceministro Llanos. Y agregó que la búsqueda de mercados para esta nueva producción no representaría un problema, pues los “países asiáticos han mostrado su predisposición en comprar todos los metálicos”. Para cada una de las refinerías se ha dispiuesto una inversión de USD 250 millones, aunque las licitaciones han estado marcadas por diversas dificultades.
"Lo importante para aumentar la producción de metálicos es diversificar la producción. Tenemos solo una fundición de estaño, una de bismuto y una de antimonio, además de una planta de cobre electrolítico en Corocoro y ahora la planta de Karachipampa, pero esos son proyectos muy antiguos, no hay nada nuevo. Lo que le falta al país es aumentar la producción de minerales"; aseguró por contrapartida el ex Ministro del ramo, Dionisio Garzón, también consultado por la publiocación: "Lo que hay que hacer es buscar nuevos yacimientos para reemplazar las reservas (que necesite Karachipampa) en el futuro. En el caso del Cobre, las reservas no se han aumentado en el país y se trabajan los desechos, desmontes de la explotación antigua, y cuando eso se acabe tampoco tenemos reservas nuevas. Se debe aumentar la producción minera de Bolivia para obtener más concentrados para estas plantas", concluyó.