Chile
17 de Marzo de 2011.- Ampliar Un masivo encuentro con empresarios en CasaPiedra y la petición de trasladar el lugar del discurso que el Presidente Barack Obama dirigirá a América Latina, forman parte de las últimas actividades pendientes en la agenda del mandatario norteamericano en su visita a Chile.
Obama llegará al país el lunes, cerca del mediodía, junto a su esposa, Michelle, y sus dos hijas: Malia, de 11 años, y Sasha, de ocho. Aquí permanecerá por casi 24 horas, en una gira que también comprende escalas en El Salvador y Brasil.
Fuentes de gobierno señalaron ayer que el jefe de Estado norteamericano decidió incluir en la visita a su secretario de Energía, Steven Chu, quien se sumará a las reuniones de trabajo en La Moneda.
Este último, además, sostendrá el lunes una reunión con su homólogo chileno, Laurence Golborne.
La presencia de Obama es considerada prioritaria para el gobierno, ya que es la primera visita estrictamente bilateral de un mandatario estadounidense en 50 años. En 1998, Bill Clinton también estuvo en Santiago, pero en el marco de la Cumbre Iberoamericana, y en 2004, George Bush para la reunión de Apec.
Sin embargo, las estrictas medidas de seguridad impuestas por el protocolo de EE.UU. han puesto en jaque propuestas calificadas de claves en La Moneda para maximizar la presencia de Obama.
La primera de ellas comprende el discurso regional que el mandatario norteamericano ofrecerá en Chile, en el que fijará la política de su administración hacia América Latina.
Fuentes de La Moneda señalaron que una de las ideas sugeridas a Obama es que realice su alocución en el Centro Cultural Palacio de la Moneda, con el objetivo de asociar la imagen del jefe de Estado americano a un escenario más ligado al gobierno chileno.
Sin embargo, hasta ahora, el equipo de seguridad de Obama ha impuesto la decisión de realizar la actividad en la sede de la Cepal, perteneciente a Naciones Unidas.
También por razones de seguridad aunque en este caso también se incluyen problemas de agenda, EE.UU. aún no acepta concretar una visita de Obama a la casa de Piñera. La idea es que ambos, en compañía de sus respectivas esposas, compartan un desayuno la mañana del martes (Estrategia).
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