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Chile

30 de Septiembre de 2010.- El martes comenzaron a llegar, desde las diferentes zonas del país, decenas de dirigentes sindicales de la minería, quienes en la práctica representan a unos 11 mil trabajadores directos de esta actividad económica. El epicentro donde se están congregando está en las dependencias de la Caja de Compensación Los Andes, en La Serena.

Allí hasta mañana discutirán acerca del presente y futuro del sector, todo con la finalidad de conciliar una estrategia común que les permita plantear con mayor fuerza una serie de mejoras y exigencias, tales como la seguridad en las faenas, la aparición de enfermedades, una reformulación del royalty minero y la crea­ción de un referente multisindical que les dé mayor representación, entre otros.

Cristian Arancibia, presidente de la Federación Minera de Chile, entidad que organiza este encuentro, expresó que en este congreso se efectuará un análisis de todas las propuestas, por lo que el viernes emitirán una resolución final, donde se perfilará el vínculo que tendrán con las autoridades y, especialmente, respecto a las respuestas a sus exigencias.

El dirigente indicó que hasta la fecha el Gobierno “no quiere tener una relación con nosotros, pero sí con los empresarios”.

Es por ello que no descarta que los gremios puedan iniciar medidas de presión para ser escuchados, tales como paralizaciones o huelgas. “Dependiendo de la respuesta que tengamos del Ejecutivo, va a haber acciones concretas”, aseveró.

Agustín Latorre, presidente del sindicato de Altonorte, de Xtrata Cooper, precisó que existe la percepción en la ciudadanía de que los mineros ganan mucho dinero o que “son privilegiados”, pero que ello no es tan así, ya que a su parecer se estaría olvidando que estos trabajadores “viven enfermedades y deterioros físicos que en otros sectores en el país no se tienen”.

Es tan grave el estado de salud de estos asalariados, opina, que “muchos no llegan a jubilarse a los 65 años”.

La otra consecuencia de trabajar en minería, añade, es la constante amenaza de sufrir accidentes de todo tipo, incluso mortales. “Este deterioro de la salud va produciendo un trabajo de menor calidad, de menor atención de lo que se está haciendo”, indicó el dirigente (Diario El Día).

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