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Chile

*Se prevé que la construcción podría ser retomada en 45 días más, pero para eso se debe dar la orden de inmediato.

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26 de Febrero de 2010.- Aunque la paralización del proyecto termoeléctrico Campiche (242 MW en la comuna de Puchuncaví, Región de Valparaíso) afectó directamente los planes de desarrollo de AES Gener, titular de la iniciativa, la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) sigue con especial atención cómo evoluciona este caso.

Esta unidad fue paralizada cuando se encontraba en plena construcción por la vía judicial (en junio de 2009), complicando el trabajo de casi una veintena de firmas, muchas de ellas ligadas a este sector, como los constructores principales (Salfa y Echeverría e Izquierdo), y otras firmas que brindan servicios complementarios.

El presidente de los constructores, Lorenzo Constant, plantea la necesidad de que las obras se retomen con la mayor celeridad posible, en especial porque ahora la situación legal del proyecto se encuentra regularizada al contar con todos los permisos ambientales al día.

"Queremos que se retome a la brevedad... esto ha significado costos para las constructoras y empresas subcontratistas, pero también hay un costo social. Había gente trabajando, del orden de 400 a 450 personas, gente de la zona", explica Constant, agregando que en el momento de la paralización la obra estaba cerca de "producir una contratación masiva y se pensaba que podía llegar a 2 mil o 2.500 personas de peak ".

Para el líder gremial, la reactivación del proyecto debe darse cuanto antes, en especial porque tras esta orden vendría un período de entre 30 y 45 días para que efectivamente puedan retomar la construcción.

Tiempos en juego

Constant explica que el desfase entre la decisión de retomar la construcción y el inicio de las obras se debe a las labores adicionales que se deben hacer producto de la paralización. "Hay cosas que quedaron detenidas y que deben revisarse. No sé si en todas hay que rehacer (las obras ya ejecutadas), pero hay trabajos complementarios que hay que volver a hacer; eso tiene un costo para todos".

De acuerdo con los datos que maneja la CChC, cuando Campiche fue paralizado en junio de 2009 ya se había invertido del orden de los US$ 100 millones, de un total estimado para todo el proyecto en torno a los US$ 500 millones.

Según los cálculos de la CChC, si se toma la decisión de reactivar las obras deberán pasar entre cuatro y cinco meses para llegar al peak de contratación proyectado para esta construcción, aunque la concreción de la central se daría en más de dos años, doce meses más de los que contemplaba el Gobierno en el plan de obras de la Comisión Nacional de Energía (CNE) de abril de 2009, informe previo a la paralización.

"Si hoy se partiera (con la reactivación), esto no va a estar terminado antes de julio de 2012", dice el presidente de la CChC.

28 meses sería el tiempo requerido, si se reactiva hoy, según la CChC, para que Campiche esté operativa.

US$ 100 millones es la inversión que ya se ha ejecutado en el proyecto que tiene un costo total de US$ 500 millones.(El Mercurio)

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