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Chile

Centro de Trabajo Radomiro Tomic generó una planta de beneficio de minerales que no tenían valor económico

24 de Mayo de 2010.- Óxidos o sulfuros. Esas son las dos únicas posibilidades que tiene cualquier mina de cobre para su producción. De hecho, en la parte más superficial de la tierra de un yacimiento es posible encontrar los denominados minerales oxidados, pero a medida que avanza la explotación hacia las profundidades, comienzan a aparecer los materiales sulfurados, los que en el caso del Centro de Trabajo Radomiro Tomic, están siendo enviados hasta el mineral de Chuquicamata, para continuar con los posteriores procesos.

Sin embargo, en la profundidad del rajo existen materiales que están en la transición entre óxidos y súlfuros y que hasta ahora no tenían tratamiento ni destino económico. Se trata de los llamados minerales mixtos.

Fue precisamente en el año 2008 cuando la Gerencia de Extracción y Lixiviación Norte de Codelco, ante el déficit que dejaban las zonas oxidadas, reconoció una gran oportunidad de desarrollo de un nuevo negocio de innovación minera y que transformaría en gran medida en el Plan de Negocios de este centro de trabajo siendo un ejemplo a seguir por otras faenas en nuestro país.

De esta manera nace la idea de construir una planta de chancado especializada, a fin de procesar este material en forma separada del resto. Así comenzó a tomar forma la llamada planta Suyai Amaru, cuya traducción en aymará significa "esperanza en tierra dura". Y cómo no, si la construcción de este nuevo sistema de chancado independiente, representa actualmente un impacto socio­económico importante para Radomiro Tomic y la minería de la región, debido a la generación de empleos que alcanzó cerca de 180 trabajos directos, pero mejor aún, beneficiar metalúrgicamente más de 20 millones de toneladas de mineral mixto.

Se trató de una inversión de 10 mil millones de pesos que dio la posibilidad que a partir de marzo del año pasado comenzara el tratamiento de estos minerales, que hoy aportan una considerable cantidad de toneladas de cobre fino por día.

"Ha sido una decisión acertada que implica innovación y desarrollo productivo. Se estima que desde su implementación en el año 2009 y hasta los últimos aportes ­que están estimados para el año 2016­ van a contribuir cerca de 70 mil toneladas de cobre fino a un costo competitivo, lo que significa aumentar los estándares de producción, recuperar un material en forma eficiente y contribuir al mejoramiento de la faena a través del uso de herramientas adecuadas fortaleciendo nuestros planes productivos. Es un gran aporte", manifestó la Superintendente (s) de Ingeniería Procesos de la Gerencia de Extracción y Lixiviación Norte, GELN, Claudia Domínguez.

Funcionamiento

El proceso de la nueva planta de chancado consiste en recibir el material mixto desde la mina, que antes era depositados en stocks, para posteriormente procesarlo a través de los chancadores y harneros existentes en la misma área, hasta lograr un producto tal que cumpla con los estándares y niveles de producción que se requieren.

Posteriormente, una vez terminado el proceso de chancado donde el mineral queda reducido a partículas más pequeñas, es trasladado hacia las parcelas de lixiviación, ­las que fueron especialmente construidas para este tipo de mineral­ y cumplir con un tiempo de lixiviación de 300 días por pila.

Se trata de un proyecto en donde intervienen y se mezclan conceptos de competitividad y productividad propios de la minería moderna, donde lo sustentable de un negocio es sinónimo de innovación, desarrollo y capacidad.

"Lo normal al interior de una mina, es que estos materiales se procesen en una menor cantidad mediante la lixiviación primaria y el resto quede "stockeado" hasta que se encuentre un tratamiento efectivo. Sin embargo, nosotros en RT hemos alcanzado el óptimo, cubriendo todo el mineral con los procesos adecuados", aseveró la profesional Claudia Domínguez.

Innovación

Este nuevo proceso es un aporte trascendental no sólo para la División Codelco Norte y la Corporación, sino también para toda la gran minería, que se ve enfrentada a la existencia de materiales mixtos que no tienen un destino económico, pero que con inversiones adecuadas y los avances tecnológicos más idóneos, permiten hoy beneficiar metalúrgicamente recursos con contenidos de cobre asociados a mineralogías que hasta ahora no tenían procesamiento.

De hecho, un ejemplo concreto de esta nueva forma de recuperación de material es que sólo este tratamiento de minerales mixtos representa ingresos superiores a los 100 millones de dólares. Sin duda, una muestra del desarrollo industrial demostrada con hechos concretos por la División Codelco Norte (El Mercurio de Calama).

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